lunes, 1 de abril de 2013

INTRODUCCIÓN





            Es posible que cuantitativamente los eventos de carácter social que tengan más seguimiento sean los Juegos Olímpicos y el Mundial de Fútbol e inclusive por encima de eventos de relevancia como lo son la entrega del Oscar, la elección del Secretario General de la Organización de Naciones Unidas y la entrega de los premios Nóbel. Estos últimos eventos nombrados tienen grupos selectos de interés, en cambio estos mismos grupos forman parte de la gran masa social que le hacen seguimiento a los máximos eventos deportivos del planeta como lo son: Los Juegos Olímpicos y el Mundial de Fútbol, tanto es así, que los grandes líderes de las potencias mundiales y países desarrollados, entran en una disputa por adjudicarse la sede de estos eventos, hasta con ocho (8) años de anticipación, para de esta manera demostrar el nivel de desarrollo de la nación que representan.

            De igual forma, en el desarrollo de estos eventos, se puede observar una movilización social a nivel mundial no vista en otros eventos que involucran participación humana.

            La capacidad de convocatoria del deporte, está demostrada tanto a nivel presencial como también directa, a través de los medios de comunicación. También podemos observar, que ningún otro evento en el mundo tiene tanto despliegue de seguridad como los antes mencionados.

            El axioma epistémico de las ciencias sociales, de observar al hombre como un animal social es realmente cierto; no obstante, el hombre, por naturaleza, también es un animal de competencia. El acto de competir le ha sido al homosapiens útil para su sobrevivencia desde épocas remotas, el hombre ha tenido que competir con otros seres humanos, consigo mismo y por supuesto con los avatares de la naturaleza.
           
            Por otro lado se puede inferir sociológicamente, que el acto de competir es, persé, un acto de dominación; con esta acción social, el sujeto trata de imponer su dominio a otros, a la naturaleza y a sí mismo, en tanto es capaz de disciplinarse para controlar sus emociones imponiendo su capacidad racional.

            Estos principios básicos de la competencia son las bases fundamentales del deporte, es en este sentido, que el deporte se puede concebir como un acto genuinamente competitivo.

            A propósito la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL), expresa:
                                                                                                         
 “El deporte es toda actividad psico-física de competencia en la cual se valoran intensamente aspectos del orden psicológico, del orden físico y del orden fisiológico, persiguiendo con la actividad el perfeccionamiento de las posibilidades morfo-funcionales y psíquicas (destrezas psicomotoras complejas) las cuales se concretaran en la superación de un registro (record) de sí mismo o de un contrincante, siempre con atención a las normas y/o reglamentos que delimitan el desempeño.” [1]
           
            La actividad física también ha acompañado al ser humano desde sus inicios, evidentemente ha evolucionado desde su escenario rudimentario al que en la actualidad observamos impregnado de modernismo.
            La actividad física en general y el deporte en especial, pueden observarse en un sentido amplio como actos que van más allá de la mera exposición corporal, son en sí, actividades humanas de desarrollo integral, en donde la racionalidad y el desarrollo de la conciencia del individuo son fundamentales para alcanzar niveles óptimos de competitividad. En este sentido, la educación física (instrumento académico del deporte), desde la perspectiva del Dr. Kano[2] (1882), expresa que existen tres áreas que ayudan al desarrollo, éstas son: cuerpo, carácter e intelecto. “El cuerpo”, escribió: “es el instrumento que se usa para el propósito de la vida, sin el cual no existe nada”. A través de estas palabras se puede apreciar la relevancia que se le concede al estado físico como medio para aprender el significado de la existencia.

            Asimismo el Dr. Kano expresa: “que para la realización de una vida en su totalidad es imperativo que se desarrolle el intelecto y el intelecto ayuda enormemente a la construcción y desarrollo del carácter.”[3]

            Esta convicción académicamente argumentada, obliga a la presunción universal, de que el deporte es una actividad única y exclusivamente humana.

            Partiendo de la última presunción se origina otra, que consiste en aprehender al deporte como un instrumento vital para el proceso de socialización del hombre, en otras palabras debe asumirse el deporte como una institución social. Las argumentaciones precedentes de asumir al deporte como un acto racional y efectivamente científico colocan de forma deficiente el refrán popular “te lo tomas deportivamente”, lo cual demuestra una ignorancia del imaginario colectivo sobre el etos de la actividad deportiva que sugiere más responsabilidad que la que presume la expresión popular.

            La dimensión científica del deporte es asumida por el Instituto Nacional del Deportes (IND) de Venezuela, cuando determina que: “por medio de las ciencias aplicadas al deporte se persigue la utilización del método científico, para detección y posible solución de problemas encontrados en el proceso técnico-metodológico-biológico-científico de la preparación deportiva.”[4]

            Entre las distintas manifestaciones del deporte se encuentra el deporte de alto rendimiento, que se concibe como aquel practicado por atletas de alto nivel competitivo, formado bajo la sistematización y rigurosidad de las ciencias aplicadas al deporte, a fín de emprender objetivos dirigidos a la consecución de récords o ranking de carácter regional, nacional e internacional.


[1]UPEL. “Educación Física, Deporte y Recreación. Volumen I”. Ediciones de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador. 1990. Pág. 23.

[2]KANO, Jigoro. Fundador del Judo. 1860-1938
[3]revista cinturon negro Nº 63. Editorial Eyras. Madrid, 1989. Pág. 20.
[4]INSTITUTO NACIONAL DE DEPORTES. “Plan de Perspectivas. 2002-2003. Ediciones del Instituto Nacional de Deportes. Caracas, 2002.  Pág. 20.


              

            A fin de abarcar el objeto de estudio de esta investigación, se ha organizado estructuralmente de la siguiente manera: un primer capítulo que contiene el planteamiento y formulación de los objetivos de investigación, la justificación e importancia con lo cual se pretende la precisión exacta de las variables que integran el estudio o fenómeno de interés.



            Un segundo capítulo, integrado por el marco histórico referencial, lo cual permite un análisis de la historia del deporte a través de la sociología.



            Así mismo, se encuentra un tercer capítulo que comprende el marco teórico integrado por: los antecedentes de la investigación, las bases teóricas, basamentos legales y el mapa de variables, en esta parte, se enfoca al deporte con un carácter sociológico paradigmático desde la perspectiva Weberiana de la acción social, pasando por la relación del deporte, con la cultura y los símbolos.


            Se prosigue con un cuarto capítulo, en donde se manifiestan el tipo de investigación, la forma como se abarcó metodológicamente el estudio, el instrumento y las técnicas utilizadas, además del análisis de los resultados.

            La esencia dinámica de la investigación por su misma naturaleza con llevó a la construcción de un quinto capítulo, que consiste en una propuesta o recomendación dirigida a solventar la situación planteada.

            Posteriormente se presenta un cuerpo de conclusiones que están íntimamente relacionadas con la consecución de los objetivos de la investigación.

            Para finalizar, es de suma importancia expresar, que este estudio tiene como objetivo fundamental, reivindicar una de las áreas más desnudas del estudio sociológico, haciendo un aporte al desarrollo teórico, epistémico y metodológico de la sociología del deporte.

Octavio Mejías, estudiante del 8vo semestre de Ingeniería de la Universidad Central de Venezuela, Selección Nacional de Levantamiento de Pesas en la categoría de los -77 Kg. Medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo 2003, participante en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, medalla de oro de los Juegos Bolivarianos de Armenia 2005, medalla de Plata de los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2006.